16.12.11

Las miradas


Es extraño, un malestar en el estomago, algo aborrecible pero a la vez… eso… extraño como yo.  Es aquí cuando la lógica inexistente en mi intenta salir y explicarlo todo con frases ya caducadas, con argumentos rosa plástico… no lo logra.
Entonces vuelo a mi cueva, salgo todos los días a caminar por el fango  y vuelo con la lluvia y las estrellas, entonces vivo en el vacío de ser la única…
Y en ese mundo cuadrado  de cemento y sin vida, mientras lucho por no ser yo, entre risas sin sentido y palabras lejanas, veo que me ves… nos vemos…  Estamos lejos… no “lejos y tan cerca”, no… lejos… con una lejanía que ni la distancia puede acortar.  Apenas y formas parte de este pedazo de mi mundo, de esta superficialidad… apenas y conozco tu voz… estamos lejos, muy lejos…
Y nuestras miradas se encuentran y nos conocemos, de alguna forma somos parte de lo mismo, no aquí, ni en mi mundo… tal vez en un mundo paralelo y bizarro; pero cuando se cruzan nuestras miradas estamos cerca, aunque jamás logremos comprender.
Cuando vuelo a casa a ese mundo donde no te pienso ni te recuerdo, la ultima luz del día me recuerda a tu mirada, no a ti, si a tu mirada.
… a ese pequeño universo que formamos entre miradas y que está condenado a la extinción.