No dejó de sorprenderme de como esto de escribir me ha atrapado tanto, ya no me concibo sin esto; y la verdad es que soy una persona que no ha podido adaptarse a la realidad cotidiana del mundo, es una misión imposible, y es que cuando intento seguir las normas establecidas y planifico con cuidado todo sale al revés entonces siempre voy por la vida a ciegas, dejándome llevar y cometiendo tantos errores. en cambio cuando escribo, no solo me comunico sino que a veces incluso me entiendo y me empiezo a conocer y escribiendo puedo crear tantas realidades como yo quiera, puedo tener el final que yo quiera, puedo hasta cierto punto controlarme a mi misma, sobre todo siempre hay una hoja en blanco esperando ser llenada.
Cuando dejo el papel y el lápiz, la cosa cambia, afuera ese mundo se mueve de una forma que no entiendo y no puedo seguir, lloverá cuando tenga que hacer sol, diré no cuando deba decir si, pasaré noches insomnes por alguien que nunca lo entenderá... En esa realidad es imposible panificar o esperar algo porque lo mas probable es que todo salga muy diferente.
No creo poder aprender a vivir esa realidad, pero la empiezo a dejar que pase a mi lado sin afectarme, empiezo a creer que puedo escribir más allá de una hoja, empiezo a no hacer de mi boca una cárcel y decir lo que quiero sin esperar respuesta, y voltear la mirada hacia otro lado cuando algo es una causa perdida y es momento de buscar nuevos caminos.
Intentaré crear para mi una realidad libre, sin rejas solo con horizontes, con alguien o conmigo misma.
