Quien me iba a decir que el destino era esto… ver mi vida pasar entre las letras, escuchar esas melodías mientras llueve… otro día se acaba y el destino era este.
Es raro que uno tenga tiempo de ponerse triste… siempre ocurre algo, y claro, está prohibido llorar sobre los libros porque no queda bien que la tinta se corra.
Hago uso de mi derecho de entristecerme, de llorar cuando todos esperan que sonría, de leer por horas a Benedetti cuando debería estar resolviendo sendos problemas de cálculo y química.
Siempre sucede lo mismo, cuando tengo estos vacíos mentales que no me dejan escribir como antes surge esta eterna lucha de mí contra mí. La lucha de lo que todos quieren hacer de mí contra quien soy en verdad.
Lucha perdida, debo confesar, porque para ser lo yo es lo que soy mejor.
Digamos que siento que la realidad me queda grande en estos momentos. Y mi buen humor y mi táctica de ser feliz pase lo que pase se quedan cortos.
Supongo que pese a todo aun puedo darme el gusto de analizar todo para intentar entender.
Creo que lo primero de todo es que me imagine viviendo estos momentos de manera diferente: entendiendo al dedillo las clases, sacando solo 10, rodeada de amigos que no me permiten ponerme nostálgica de mi antigua vida, habiendo desterrado los enamoramientos de mi vida…
Y las cosas son muy diferentes, me siento muy reprimida, no entiendo un 35% de las clases, no me alcanza el tiempo para hacer todo lo que debería hacer pero si para lo que quiero hacer, no estoy sacando 10 en todo, tengo amigos a los que quiero mucho pero no puedo evitar que me recuerden más mi antigua vida, mi antiguo grupo, mi familia… Todo lo que paso y no volverá es lo que más extraño.
Pero extraño cuando esos problemas del corazón eran un buen argumento para un poema, un pretexto para burlarnos de alguien porque le salían corazones de los ojos…
Jordan dice que me he enamorado, si claro, como todo tenia que suceder de manera menos esperada y de forma totalmente anormal. Si, lo confieso, experimento un sentimiento nuevo para mí, que me ha tenido noches enteras imaginando encuentros, conversaciones, escribiendo sin cesar por y para alguien que apenas sabe que existo. Bastaron 2 meses para provocar eso en mi, absurdo!!!!
Pero me gusta saber que puedo sentir algo así, no me gusta cuando te veo a lo lejos y ni siquiera puedo desviarme para cruzarme contigo porque mi “vida” no lo permite, odio saber que esa estupidez que llaman “metas” nos alejan, confieso que nosotros mismo nos alejamos.
Odio que aparezcas en cada pensamiento, que tu nombre este escondido en cada palabra que sale de mi mano, en cada sonrisa que brota de mí. Odio pensarte antes de acostarme y odio pensarte en la mañana cuando corro a clases.
Es increíble como 3 palabras tuyas me tienen así, odio que casi 4 meses de silencio y de ignorarnos se vayan al carajo por esas palabras tan superficiales tuyas.
Sin embargo te quiero, como no podre querer a nadie con quien conviva más de 2 meses, te quiero como no podre querer a nadie que haya hecho más por mí que tú.
Espero que cuando haya dicho todo lo que tengo que decir de ti, esto pase, espero que eso sea pronto.
Hace 1 año estaba este mismo día sentada en la terraza de mi casa comiendo helado a pesar de la lluvia y pensando en lo que va ha hacer después “Pedrito”, el ultimo personaje que había creado para un cuento bizarro.
No había nada más en mi mente y hoy estoy atrapada en una encarnizada lucha conmigo misma…
¿Quién diría que el destino era esto?
PD: Por Dios!!!! Pongan una válvula de escape en mi cerebro para que se vayan estos pensamientos de mi cabeza….
Es raro que uno tenga tiempo de ponerse triste… siempre ocurre algo, y claro, está prohibido llorar sobre los libros porque no queda bien que la tinta se corra.
Hago uso de mi derecho de entristecerme, de llorar cuando todos esperan que sonría, de leer por horas a Benedetti cuando debería estar resolviendo sendos problemas de cálculo y química.
Siempre sucede lo mismo, cuando tengo estos vacíos mentales que no me dejan escribir como antes surge esta eterna lucha de mí contra mí. La lucha de lo que todos quieren hacer de mí contra quien soy en verdad.
Lucha perdida, debo confesar, porque para ser lo yo es lo que soy mejor.
Digamos que siento que la realidad me queda grande en estos momentos. Y mi buen humor y mi táctica de ser feliz pase lo que pase se quedan cortos.
Supongo que pese a todo aun puedo darme el gusto de analizar todo para intentar entender.
Creo que lo primero de todo es que me imagine viviendo estos momentos de manera diferente: entendiendo al dedillo las clases, sacando solo 10, rodeada de amigos que no me permiten ponerme nostálgica de mi antigua vida, habiendo desterrado los enamoramientos de mi vida…
Y las cosas son muy diferentes, me siento muy reprimida, no entiendo un 35% de las clases, no me alcanza el tiempo para hacer todo lo que debería hacer pero si para lo que quiero hacer, no estoy sacando 10 en todo, tengo amigos a los que quiero mucho pero no puedo evitar que me recuerden más mi antigua vida, mi antiguo grupo, mi familia… Todo lo que paso y no volverá es lo que más extraño.
Pero extraño cuando esos problemas del corazón eran un buen argumento para un poema, un pretexto para burlarnos de alguien porque le salían corazones de los ojos…
Jordan dice que me he enamorado, si claro, como todo tenia que suceder de manera menos esperada y de forma totalmente anormal. Si, lo confieso, experimento un sentimiento nuevo para mí, que me ha tenido noches enteras imaginando encuentros, conversaciones, escribiendo sin cesar por y para alguien que apenas sabe que existo. Bastaron 2 meses para provocar eso en mi, absurdo!!!!
Pero me gusta saber que puedo sentir algo así, no me gusta cuando te veo a lo lejos y ni siquiera puedo desviarme para cruzarme contigo porque mi “vida” no lo permite, odio saber que esa estupidez que llaman “metas” nos alejan, confieso que nosotros mismo nos alejamos.
Odio que aparezcas en cada pensamiento, que tu nombre este escondido en cada palabra que sale de mi mano, en cada sonrisa que brota de mí. Odio pensarte antes de acostarme y odio pensarte en la mañana cuando corro a clases.
Es increíble como 3 palabras tuyas me tienen así, odio que casi 4 meses de silencio y de ignorarnos se vayan al carajo por esas palabras tan superficiales tuyas.
Sin embargo te quiero, como no podre querer a nadie con quien conviva más de 2 meses, te quiero como no podre querer a nadie que haya hecho más por mí que tú.
Espero que cuando haya dicho todo lo que tengo que decir de ti, esto pase, espero que eso sea pronto.
Hace 1 año estaba este mismo día sentada en la terraza de mi casa comiendo helado a pesar de la lluvia y pensando en lo que va ha hacer después “Pedrito”, el ultimo personaje que había creado para un cuento bizarro.
No había nada más en mi mente y hoy estoy atrapada en una encarnizada lucha conmigo misma…
¿Quién diría que el destino era esto?
PD: Por Dios!!!! Pongan una válvula de escape en mi cerebro para que se vayan estos pensamientos de mi cabeza….
